
Antiguamente los padres se sentaban con sus hijos para hablar de temas como podrían ser los vicios en general, y era una conversación fundamental para asegurar de que el joven tuviese cuidado con las opciones que quisiese tomar.
Pero, hoy en día las cosas parecen no ser así, y son muchas personas las que están enganchadas a algún u otro vicio. Ya esto no incluye sólo temas de drogas, ni la ludopatía o el alcohol, sino que en este grupo introducimos también a la Demencia Virtual.
Los médicos comenzaron a alertar a las personas sobre esta enfermedad en el 2007. Sus estudios muestran que cada año son más las crianzas que sufren problemas de atención, pérdida de memoria y hasta depresión.
Estos desvíos son típicos en la generación digital que están viviendo los niños de hoy en día, y los síntomas son muy parecidos a los que provoca una lesión cerebral muy grave.
Los científicos estiman que un niño de 7 años de edad, dedica su tiempo a televisión, tablets, y teléfonos, más de un año seguido, juntando todo el tiempo que dedican a estos dispositivos.
Estos niños, a la edad de los 18 años, tendrán una media de 4 años en gasto perdido en el mundo virtual. Incluso a sabiendas que los niños de hoy en día saben manejar estos aparatos mejor que muchos mayores, porque son muy inteligentes, pero a pesar de ello no es nada bueno para su salud.
Esta demencia digital hace que se deterioren las habilidades cognitivas, igual que las personas que sufren traumatismos craneales o que tienen alguna enfermedad psiquiátrica.
Hay que añadir que el niño puede encontrar mucha información útil en internet y esto es bueno, pero siempre debe estar controlado por los padres, es importante que el cerebro del niño se desarrolle con otras competencias y actividades que hagan trabajar las habilidades físicas y sensoriales.
Según la investigación que ha realizado la profesora Tanya Byron de psicología, desde 1970 el radio de actividad de los niños ha disminuido en un 90%.
El comportamiento de los padres, por otro lado, muestra que tienen miedo a que su niño se sienta desplazado por otros adolescentes. Por estas razones que expone el estudio, se ve como la era digital está cambiando la infancia de nuestros hijos, tanto para bien como para mal.