¿Qué pasa cuando dejas una hamburguesa con queso de McDonalds al aire libre durante 2 años? La respuesta es nada en realidad. No aparecen malos olores, ni moho, ni siquiera algunas hormigas.
Precisamente esto fue lo que quisieron demostrar 2 doctoras en quiropraxia de Michigan, en EEUU. Por eso, la Dra. Jessica Freed dejó sobre el escritorio de su consultorio una hamburguesa con queso y papas fritas comprada en McDonalds y además, un taco de pollo comprado en la franquicia estadounidense Taco Bell.
Por su parte la Dra. Jacqueline Vaughn, declaró que lo hicieron con la esperanza de que la gente empezara a pensar qué pone en su cuerpo cada vez que come comida rápida.
“¡Veamos cuánto se tarda esta comida rápida en podrirse!” reza el anuncio colocado sobre el plato de hamburguesa y papas fritas de McDonalds, comprado el 8 de enero del 2013, y del taco de pollo de Taco Bell, comprado el 5 de febrero del 2013.
Dos años después, los platos se ven prácticamente iguales – sólo el queso en la hamburguesa se puso algo oscuro. La Dra. Vaughn declaró a MailOnline que no hay malos olores y que la hamburguesa está básicamente momificada.
“Pensábamos que algunos insectos se acercarían en algún punto, pero definitivamente no pasó”, dijo Fried.
Yafan Zhang, un profesor de Ciencia de los alimentos en la Universidad Estatal de Wayne, EEUU, dijo que un aditivo llamado propanoato de calcio hace que la comida se vea casi comestible aún después de tanto tiempo. Además, dijo a CBS que esta sustancia no es tóxica y se utiliza en una amplia gama de productos para mantenerlos frescos, desde el pan hasta la carne procesada de las hamburguesas, todos lo tienen.
No es peligroso ingerir dicho producto, aunque a veces puede causar inflamación en el estómago. No hay nada de qué preocuparse, a menos que tengas pensado comerlo todos los días.
F: Mirror, eBaum´s World