Después De 3 Meses Del Nacimiento De Su Hijo, Recibió Una Noticia Totalmente Impactante.


Una familia ha vivido una historia de terror al alegar que su hijo fue intercambiado al nacer, y según ellos creen, con el fin de venderlo a traficantes, en El Salvador.

Richard Cushworth y su esposa, Mercedes Casanellas, hicieron una petición pública pidiendo que les regresen a su bebé, después de que las pruebas de ADN demostraron que el niño que estaban cuidando, creyendo que era su hijo desde su nacimiento, no era de ellos.

Hoy, la familia ha encontrado a su hijo verdadero, y aunque están felices, sienten pena por la otra familia, que no tenía idea de que estaban criando al niño equivocado.

En esta foto, la pareja está con Jacob, el niño que les fue entregado en el hospital como su hijo.

Los investigadores rastrearon al hijo biológico de los Cushworths, pidiendo pruebas de ADN a las otras madres que tuvieron a sus bebés el mismo día.

David Cushworth, el abuelo del bebé, que acompañó a la pareja cuando los dos niños fueron intercambiados y se reunieron finalmente con sus padres biológicos, dijo: “Todos estamos absolutamente encantados. Esta es una respuesta a miles de oraciones… Toda la evidencia circunstancial señala un acto criminal, pero la historia oficial nos dice que aparentemente fue un error, una confusión. No puedo decir con certeza lo que realmente sucedió. Tendremos que ver cómo va a través del sistema legal antes de poder confirmarlo totalmente. Lo siento por la otra familia. No sabemos nada acerca de ellos, salvo que sólo se acaban de enterar hoy que su bebé no es realmente suyo. Debe haber sido devastador. Al menos nosotros sospechábamos que había algo mal. Pero ellos parece que no tenían ni idea. O si sospechaban algo, no querían decirlo”.

En declaraciones a MailOnline el lunes, el Sr. Cushworth dijo que la familia se ha visto obligada a firmar una orden de mordaza. El intercambio de hijos tuvo lugar ante un juez en un sexto piso de la oficina de la Fiscalía General de la Nación, en Santa Elena, a las afueras de San Salvador.

El martes por la mañana, el señor Cushworth escribió en Facebook para agradecer a todos los que contribuyeron para que ellos se reencontraran con su hijo.

“No hay palabras para expresar lo que nuestro corazón siente al tener a nuestro bebé en casa! Gracias a todos los que se unieron en nuestro dolor y alimentaron nuestra esperanza. Gracias a Dios nuestra familia esta reunida, por el momento no se nos permite subir fotos, pero pronto les daremos más detalles de los resultados de este milagro”.

Tanto los Cushworths como los padres del hijo que estaban criando, se colocaron bajo secreto de sumario por el juez de la causa. El Fiscal General Luis Martínez, dijo a los periodistas que la privacidad de los niños era primordial.

“Apreciamos la ayuda que hemos recibido de la medicina forense para ayudar a resolver este trágico suceso”.

Los Cushworths acusaron al Dr. Alejandro Guidos, un ginecólogo en el prestigioso Hospital Centro Ginecológico, de planear un complot con el resto del personal del hospital para cambiar a su bebé y venderlo a los traficantes. El Dr. Guidos fue liberado por las autoridades el lunes por la noche, pero se entiende que aún está bajo investigación.

Los padres de los otros cuatro niños que también nacieron en el mismo día, el 21 de mayo, realizaron pruebas de ADN después de que la orden fue emitida por la Oficina del Fiscal General de la República, que se había hecho cargo de la investigación. El bebé, cuyas pruebas fueron las últimas en ser procesadas, resultó ser el verdadero hijo de la pareja.

El abogado de la familia, Fernando Meneses, dijo que el caso ‘aparentemente’ parecía ser un error accidental, e instó al hospital a revisar los procedimientos para asegurarse de que no podía volver a ocurrir.

Mercedes dijo en declaraciones anteriores: “Yo amo a mi bebé, él es mi bebé, estoy incluso amamantándolo en este momento “, dijo del bebé que le fue entregado en el hospital como su hijo, al que llamaron Jacob.

“Si no pueden encontrar a su madre, él ya tiene padres, nosotros. Lo hemos cuidado a pesar de que sabemos que no es nuestro hijo biológico, y le amamos. Estamos orando y confiando en Dios, él nos va a ayudar”.
La Sra Casanellas dijo que estaba convencida de que su obstetra, el Dr. Alejandro Guidos, había planeado el intercambio desde el principio.
“Vi a mi hijo a las 21:30 cuando nació, y luego me pusieron a dormir. Por la mañana, alrededor de las 8, trajeron a los bebés de todos, pero nunca trajeron al mío. Yo les dije: ¿Dónde está mi bebé? ¿Dónde está mi hijo?, y ellos dijeron que ya lo traerían”.

“Lo llevaron a la hora del almuerzo, y yo les pregunté ‘¿por qué el bebé está diferente?’ Él tenía la piel más oscura, sus rasgos faciales eran diferentes, la nariz, las cejas. Me dijeron que era porque él era un recién nacido, y que estaba hinchado y que él iba a cambiar”.

“Pero entonces, mi familia comenzó a hacer comentarios, les parecía que el bebé era diferente. Dijeron que no se parecía a mi ni a mi esposo”.
“Pensé, ¿cómo podría siquiera creer que este no es mi hijo?, pero los pensamientos estaban siempre en mi mente, y finalmente, después de mucho tiempo, tomé la decisión de tomar una prueba de ADN, porque no quería tener estos pensamientos acosándome adentro”.

“Sólo queremos que nos entreguen a nuestro hijo”.

“Teníamos las huellas tomadas de mi hijo cuando nació en su certificado de nacimiento. Más tarde, cuando volví a cambiar un error en el documento me di cuenta de que las impresiones en su certificado eran diferentes a los que teníamos – eran más pequeñas y con un patrón diferente”.
En el Hospital Ginecológico de San Salvador, considerado el mejor hospital privado en el país, en un principio negaron que el bebé podría haber sido cambiado, diciendo que era “imposible” debido a sus “altos estándares” de control.
Google Plus
Loading...