Un Lama Tibetano, conocido como el Oraculo de Shambhala, envío un mensaje a la NASA diciéndoles qué pasará con la Tierra el próximo 21 de diciembre, y dando consejos a los humanos para poder sobrevivir este desastre mundial.
Según medios de comunicación que citan al Oráculo, el 21 de diciembre de este año, a las 6.00 GMT casi todo el planeta estará sumido en una oscuridad y en un silencio absoluto, no habrá luz, electricidad y mucho menos comunicaciones. La Tierra estará atravesando la "Línea Cero" de la galaxia.
Shambhala nos dice que los animales del planeta sentirán la llegada de la oscuridad e intentaras ocultarse en madrigueras, este estado se le califica como "Estado de Espacio" donde no se difunde ningún tipo de energía, los objetos carecen de campos electromagnéticos, existirá quienes tengan la impresión de que los muertos se levanten de sus ataúdes, y muchas personas se volverán locas, alrededor del 10% de la humanidad morirá.
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Según la teoría del tibetano, este evento durará de tres a cuatro días, y estará acompañada por destellos espaciales y llamaradas ilusorias de la luz, tras el cual el Sol volverá aparecer.
Los consejos que nos da el Oráculo son:
Es necesario prepararse para este cambio de ciclos, al completar todos los asuntos importantes en 2012, sin dejar nada serio para el año próximo ni enredarse en las deudas.
El día anterior al apocalipsis, es decir, el 20 de diciembre, la gente debería irse de las ciudades a las casas rurales junto con sus familiares, con una reserva de alimentos para al menos dos meses, ya que las redes energéticas tardarán en ser restauradas.
No hay que olvidar reservar agua, leña y velas suficientes para la iluminación y calefacción, ya que a partir del 21 de diciembre del 2015 no habrá electricidad.
Durante los "días oscuros" es necesario tapar las ventanas con tela espesa, no mirar en su dirección, no salir.
Con el regreso de la luz, es aconsejable esperar para volver a las ciudades y quedarse en el campo por lo menos hasta la primavera.
El apocalipsis tendrá una duración de dos semanas. No obstante, la Humanidad seguirá percibiendo las consecuencias del fin del mundo durante varios meses. Sólo a finales de marzo, el planeta se recuperará completamente.