Cerca de 20 mil aficionados se reunieron en Uzbekistán para ver en acción a uno de los mejores mas polémicos jugadores del mundo, el portugués Cristiano Ronaldo, pero al jugador le salió una dura competencia y no fue precisamente Lionel Messi, su rival en las canchas de fútbol sino un pequeño niño de diez años quien humilló al hombre del Real Madrid.
El niño comenzó dominando el balón y haciendo jueguitos con él a la par que con el jugador, en un momento de exhibición antes de un partido. El portugués creía que el niño estaba allí solo para ver sus piruetas y su buen hacer futbolístico, pero con lo que nadie contaba es con que este pequeño era un mini crack del fútbol en potencia demostrando gran maestría en el dominio del esférico, viéndose en todo momento muy relajado como si el balón estuviera en su poder todo el tiempo.